¡Así como las personas, cada animal también es diferente! Si hacemos la medición de la concentración seminal a “ojo” igual para todos los eyaculados, podemos estar ocasionando:

1. Que el macho tenga una concentración muy alta, lo que nos alcanzaría para procesar una mayor cantidad de dosis seminales, pero si lo diluimos igual que cualquier otro, al quedar con una concentración tan alta de espermatozoides, entonces la duración de las dosis va a ser muy inferior, ya que las células espermáticas se “comerán el diluyente” (que es su medio nutritivo), en un menor tiempo y así la calidad y vida del eyaculado se va a ver disminuida.
2. Por otro lado, si es un macho joven, un macho ya viejo o uno que tenga problemas en su eyaculado, vamos a estar preparando unas dosis con menor cantidad de células espermáticas y por ende vamos a tener menor fertilidad y mayor número de repeticiones, ya que estos machos dan una menor concentración y volumen o tienen problemas reproductivos.

Adicionalmente a lo anterior, los resultados pueden descargarse a una hoja de cálculo de Excel para realizar gráficos y otras manipulaciones utilizando los accesorios adecuados.